En la tarde de ayer aproximadamente a las 18:30 horas se solicitó la presencia policial en una vivienda ubicada en la calle César Lobos al 300. Una vez allí, los efectivos de la comisaría Seccional Sexta constataron que se había producido un robo, ya que la puerta del frente de la casa había sido violentada.

El faltante era un televisor y una guitarra eléctrica con características particulares con un logo de un águila y un árbol en la parte trasera de la misma.

El dueño (32) había ido a su trabajo a las 9:00 horas, y reconoce que la alarma se encendió a las 11 de la mañana pero recién se percató del robo cuando regresó a las 18. El hombre, único residente en la casa, indicó a la policía que aproximadamente a las 11 de la mañana él supo que la alarma se había encendido, pero como ya le había pasado en otras ocasiones, sus dos galgos, que están dentro de la casa suelen activar la sirena de la alarma, esta vez creyó lo mismo, por eso no regresó. Obviamente eso hubiera hecho que descubriera el hecho más temprano.

La puerta de la casa tenía la cerradura destrozada por lo cual se presume que habría recibido un fuerte golpe, posibilitando al ladrón ingresar directamente y llevarse los elementos indicados.

La policía se encuentra abocada a la posibilidad de identificar al individuo recabando datos. Asimismo, participó de las actuaciones el personal de la División Criminalística.