
El secretario de Gobierno de Puerto Deseado, Mauricio Marsicano recorrió diversos medios esta semana para dar información certera de la ordenanza que establece mayores controles sobre los perros callejeros que representan un riesgo para la comunidad. Dijo que se apunta generar conciencia, responsabilidad, fomentar la adopción y solucionar la problemática de los canes mordedores que ponen en peligro a las personas.
?Como Estado no podemos hacer oídos sordos al reclamo de los vecinos que quieren seguridad para transitar libremente por Puerto Deseado?. Así de contundente fue Mauricio Marsicano, secretario de Gobierno deseadense, acerca de la polémica que generó la ordenanza 6933/18. ?Me he puesto al frente de la defensa de este accionar estatal porque me parece que si no siempre se deja de lado el problema de la gente por la exposición pública o cómo nos puedan llegar a maltratar?, enfatizó. ?Yo no voy a permitir que esto siga sucediendo?, sentenció el funcionario.
La ordenanza aprobada por el Honorable Concejo Deliberante detalla cómo debe proceder la Dirección de Control Canino ante situaciones riesgosas como las que se sufren en los últimos tiempos. Se sustenta en un trabajo del licenciado de la UNPA Diego Procopio, quien realizó una investigación y censo de canes que arrojó un número estimativo de 10 mil perros en Puerto Deseado, de los cuales 1600 son callejeros. Este estudio, junto a otros del HCD sobre legislaciones en diferentes lugares, ha motivado la necesidad de tomar cartas en el asunto; decisión justificada además por los reiterados ataques a ciudadanos e incluso por la matanza de fauna silvestre por parte de canes sueltos, como la muerte de 400 pingüinos de Magallanes en época de reproducción que tuvo lugar en la Reserva Provincial Ría Deseado en 2016.
Mientras que la medida contó con la comprensión y gran apoyo entre los vecinos, también alzó voces en contra respecto a puntos particulares que Marsicano se propuso aclarar. En este sentido recalcó que el municipio ?no está planeando matar perros de manera sistemática? como se sostiene desde algunos sectores. ?Esto es un conjunto de herramientas para trabajar a corto, mediano y largo plazo? siempre con el objetivo puesto en ?continuar con las campañas de adopción; de castración; el registro; y las capacitaciones sobre tenencia responsable?.
Expresó que hoy la vuelta de un móvil para recoger canes de la calle obedece a la necesidad de resolver la situación de los animales mordedores que ya han sido denunciados y de los cuales nadie se hace cargo: ?No se está recolectando de la vía pública cualquier perro que anda suelto, solo se ataca la problemática del mordedor que ya fue denunciado?. El vehículo habilitado recolecta a estos perros y los lleva al centro de Control Canino donde son puestos en observación, se les da la vacuna antirrábica, se chequea si están registrados y se busca al dueño. De no tenerlo el animal podrá ser adoptado, reeducado y reinsertado si aparece alguien dispuesto a hacerse responsable por él. Por otra parte la eutanasia es pensada siempre como un último recurso para casos graves de perros que ataquen y sean reincidentes y, de hecho, no se ha aplicado en ningún caso aunque en muchos sitios se divulga la información de que ya se ha puesto en práctica. ?En la ordenanza está prevista la eutanasia, no lo vamos a negar ni lo hemos negado en ningún momento?, reconoció el secretario, aunque insistió en que se aspira a que los animales puedan volver ?a las viviendas de los vecinos que se hagan responsables?.