Tres adolescentes sufrieron graves heridas cuando chocaron con el auto en el que iban a 200 kilómetros por hora en City Bell mientras los perseguía la Policía. Quien presenta un cuadro más complicado es el conductor, quien se llevó el coche de su tío, aparentemente sin autorización, y salió despedido.
El accidente ocurrió este lunes a las 6 en la esquina de 467 y 19. De acuerdo con el relato de testigos, la persecución empezó cuando el Peugeot 307 descapotable pasó de contramano y a alta velocidad por la Comisaría 10, a unas ocho cuadras del lugar del impacto.
También se acuerdo con el relato de los testigos, el coche iba conducido por Alex Sebastian Siapero, quien perdió el control al saltar una cuneta e impactó contra los árboles de la cuadra.
Entonces Siapero salió despedido. De acuerdo con información oficial, sufrió fracturas en ambas extremidades inferiores y politraumatismos. Debió ser intervenido por una perforación en el pulmón.
Mientras tanto, los dos acompañantes quedaron en el interior del auto con distintas heridas. Todos fueron trasladados al hospital de Gonnet. Fueron identificados como Franco Javier Portelli, de 18 años, y Santiago Pérez Escobar, de 17.
"De pronto escuché una tremenda explosión. Cuando salí a la calle vi uno de los chicos tirado y el auto destrozado arriba de la vereda", reveló Mario. "Esta calle tiene unos 200 metros y hubo pedazos del auto que volaron 150 metros?, agregó.
?Imaginate que un pedazo del motor terminó en el patio de una casa que, por suerte, está en obra. Pegaron contra tres árboles", afirmó.
Siapero quedó imputado por "lesiones culposas" y, según trascendió el dueño del Peugeot es Daniel Hector Ibáñez, tío del joven, quien actualmente se encuentra en el exterior.
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