Cuando el 25 de diciembre aparecieron historias en Instagram bastante extrañas, Sabrina Rojas y Luciano Castro tuvieron que blanquear su realidad. Por un lado, explicaron que habían sido hackeados y además, anunciaron que ya no estaban juntos. También se apresuraron en decir que 'no hubo terceros ni conflictos, sino, un simple desgaste de pareja'.

Pero los rumores explotaron así como las versiones cruzadas sobre el punto de quiebre de esta relación. En un primer momento, ambos hablaron para calmar las aguas pero no lo lograron por lo que terminaron llamándose a silencio. Pero en las últimas horas, la actriz sintió que su paciencia había llegado a un límite y se plantó.

En su cuenta de Instagram, compartió una de las tantas publicaciones 'maliciosas' y disparó: "Es mucho decir que paren de decir pelotudeces. Perdón pero tengo las bolas llenas". Y agregó: "por qué cuando suponen que una pareja se separa por una infidelidad, siempre pero siempre es de él hacia ella y nunca al revés. Qué pensamiento machista".



Más allá de esto, Sabrina y Luciano están analizando cómo continuarán su vínculo en Buenos Aires ya que por ahora, ninguno de los dos quiere hablar de nada 'definitivo'.

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