Ya se abrieron las mesas para que unos 33 millones de argentinos voten en las primarias abiertas, obligatorias y simultáneas (PASO). Esta vez solo habrá internas en 18 provincias, de las cuales Cambiemos dirimirá candidatos en 11 distritos, mientras que el peronismo -en sus distintas vertientes- lo hará en 12. El Presidente Mauricio Macri enfrenta su primera elección de medio término que terminará de dibujar el mapa político de su mandato. Cristina Kirchner, a su vez, se juega el liderazgo del peronismo.

Según cifras de la Cámara Nacional Electoral, un total de 33.104.626 argentinos están habilitados para votar en 98.084 mesas distribuidas en 14.433 establecimientos en todo el país, en unos comicios custodiados por unos 100 mil efectivos militares y de seguridad.

En cada mesa del país se vive una realidad diferente. En Neuquén, por ejemplo, recomendaron ir a votar temprano, a raíz de los fuertes vientos. En La Pampa, dos rutas nacionales que pasan por la provincia fueron cortadas a raíz de las inundaciones, por lo que los automovilistas deberán utilizar caminos alternativos por rutas provinciales en muchos casos para llegar a los lugares donde deben votar.

Hay 98.084 urnas habilitadas para votar. El sistema de las PASO -instrumentado en 2009- permitirá definir los candidatos a diputados nacionales de todas las provincias y a senadores sólo en ocho distritos, que competirán en las elecciones legislativas del 22 de octubre.

En las legislativas se renovarán 127 bancas de diputados nacionales por un período de cuatro años y 24 del Senado, 3 por cada uno de los 8 distritos cuyos representantes finalizan en diciembre próximo sus mandatos de seis años.

Además de las compulsas internas que definirán -en algunas fuerzas políticas y en algunos distritos- cuál de sus listas irán a las urnas en las elecciones de octubre, las PASO ponen también a prueba a las fuerzas políticas más pequeñas, que enfrentarán el desafío de superar el 1,5% de los votos para poder seguir en carrera.

También habrá primarias para cargos provinciales en 7 distritos: ciudad y provincia de Buenos Aires, Formosa, Mendoza, Salta, Santa Fe y Catamarca.

En seis distritos -Formosa, La Rioja, Misiones, Tierra del Fuego, Río Negro y Santiago del Estero- no habrá competencia interna en ninguna de las agrupaciones políticas que se presentan.

En el resto de las provincias, Cambiemos tendrá internas en 11 distritos (Catamarca, Chaco, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, Mendoza, Neuquén, Salta, San Juan, San Luis y Santa Cruz), mientras que el peronismo en sus distintas vertientes dirimirá postulantes en 12 (Ciudad de Buenos Aires, Chaco, Chubut, Corrientes, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Salta, Santa Cruz, Santa Fe y Tucumán).

En todos los distritos, la oferta electoral con vistas a las elecciones legislativas de octubre próximo quedará completamente definida recién el 2 de septiembre próximo cuando, según el cronograma oficial, vencerá el plazo para la inscripción de las nóminas que competirán en las urnas.

Más allá de los resultados de las PASO, las fuerzas políticas que hoy tienen competencia interna en las urnas deberán, una vez finalizado el escrutinio definitivo, establecer la integración final de las listas con las que competirán en octubre, que debe garantizar la presencia de candidatos de los diferentes espacios de manera proporcional a los votos cosechados en las urnas.