tentado dejó el saldo de 40 muertos y 20 heridos en Christchurch, Nueva Zelanda, en la madrugada de este viernes. Cuatro personas fueron detenidas tras los hechos. "Hay cuatro personas bajo custodia. No nos consta que haya más implicadas pero no podemos asumir que no haya más", dijo en rueda de prensa el jefe de la policía, Mike Bush.
A los sospechosos se les encontró artefactos explosivos en sus autos y se trata de tres hombres y una mujer. Las mezquitas de Christchurch estaban repletas por la sesión vespertina de oraciones, cuando comenzaron los disparos. Un portavoz de la comunidad musulmana, Mustafa Farouk, indicó que en una de las mezquitas había reunidas entre 300 y 500 personas, según Radio New Zealand.
Por los hechos, la parte sur de la isla quedó bloqueada durante varias horas. Mientras se inicia la investigación, el tirador Brenton Tarrant publicó en internet un video donde muestra el ataque. Nueva Zelanda, un país que sólo ha tenido un puñado de tiroteos masivos en su historia, vive uno de sus "días más oscuros", dijo la primera ministra Jacinda Ardern.
"Lo que ha ocurrido en Christchurch es un acto extraordinario de violencia sin precedentes. No tiene lugar en Nueva Zelanda. Muchos de los afectados serán miembros de nuestras comunidades migrantes; Nueva Zelanda es su hogar, somos nosotros" expresó la mandataria.
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