Los dos presos que se fugaron de la Comisaría de Sarmiento, Samuel Alberto Alcalá y David Emanuel Fernández, fueron detenidos ayer a las 18:00 horas, cuando escapaban a campo traviesa rumbo al Bosque Petrificado, en inmediaciones del Viejo Tambo. Un puestero los reconoció cuando fueron a un establecimiento a pedir un vaso de agua y un caballo. Alcalá, imputado por femicidio, corría con botas de goma.

En otro orden de cosas se supo que los jefes de la Comisaría de Sarmiento fueron puestos a disponibilidad.
Ayer, a las 17:30 horas el jefe de la Brigada de Sarmiento, Emanuel Morales, y el oficial Patricio Rojas de la Brigada de Investigaciones de Comodoro Rivadavia recapturaron a los dos evadidos de la Comisaría de la ciudad de los lagos, Samuel Alcalá y Emanuel David Fernández, quienes se habían fugado a las 03:30 hs., por la puerta trasera de la dependencia.

Morales y Rojas lograron interceptar a Alcalá y a Fernández cuando corrían a campo traviesa a 15 Km. de Sarmiento rumbo al Bosque Petrificado en la provincia de Chubut, en inmediaciones del ?Viejo Tambo?.

El jefe de Unidad Regional, Ricardo Cerda, informó que los dos fugados habían pedido un vaso de agua y un caballo en un establecimiento y que el puestero los reconoció porque había visto una foto de los prófugos y no dudó en llamar a la policía.

De ese modo, Morales y Rojas ?conocido en la policía como el capturador ya que lleva más de 100 capturas - detuvieron a los prófugos. Alcalá corría con botas de goma como podía y Fernández lo hacía con unos pesados zapatos de seguridad.

Al cierre de esta edición, el ministro de Gobierno, Federico Massoni, informaba públicamente que en la Comisaría de Sarmiento trabajaba la División Asuntos Internos y que mientras se hacía un relevamiento de lo que había sucedido en la madrugada para deslindar responsabilidades, se pasó a disponibilidad a los dos jefes, siendo también muy probable que otros tres efectivos les siguieran los pasos en las próximas horas.

Falta de infraestructura

Samuel Alberto Alcalá (33) y Emanuel Fernández (19) estaban alojados en el salón de visitas debido a la falta de plazas en esa dependencia y se encontraban a la espera del traslado que ya se había solicitado.

Según las fuentes a las que accedió El Patagónico, la fuga debió producirse entre las 2:50 y las 3:30 de la madrugada de ayer, cuando ambos lograron llegar hasta el pasillo contiguo al salón de visitas y sin demasiado esfuerzo empujaron el portón metálico tras levantar el pasador que lo sujeta al piso. Una vez que atravesaron ese primer obstáculo, lograron con éxito trepar el segundo portón, que los comunicó directamente con la Avda. Ingeniero Coronel saltando un paredón (altura de 1,80 mts.). Una vez que pisaron la vereda se perdieron en la lluviosa noche.

A todo esto, cuando se advirtió el hecho se hicieron las comunicaciones de rigor y se activó el correspondiente alerta, montándose operativos cerrojo, controles vehiculares y rastrillajes con la Guardia de Infantería y la División Canes de la Policía del Chubut.

Alcalá se encuentra imputado como presunto autor del delito de femicidio y de tentativa de femicidio, por el hecho que tuvo como víctima a su pareja Lorena Piedras y a la hija de ésta de 15 años. Se encontraba detenido con prisión preventiva desde el pasado 12 de mayo del corriente año.

En tanto Fernández estaba preso desde el 28 de marzo de 2019, siendo investigado como presunto autor del delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por ser cometido por un hermano, en calidad de autor.

 

Fuente: El Patagónico