Hoy fue debatido en la Cámara Oral de Río Gallegos, capital de la provincia de Santa Cruz, un juicio de presunto abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la guarda. El mismo tiene como imputado a un jubilado gastronómico de 73 años que está acusado de haber abusado de dos nenas de 6 años, al menos, durante el 2016.

Según pudo saber Santa Cruz en el Mundo, el caso se remite al año 2016, pero fue denunciado en enero del 2017. En esa oportunidad, la mujer que cuidaba a las nenas expuso lo que el ?abuelo? de las víctimas les hacía en la privacidad.

Como el acusado es de avanzada edad, cuenta con prisión domiciliaria y hoy llegó a la Cámara para ser juzgado por el tribunal encabezado por el Dr. Joaquín Cabral.

Cuando el imputado fue sentado en el banquillo de los acusados, negó todas las acusaciones en su contra. Quienes apoyaron su declaración fueron su mujer y una de sus hijas.

En paralelo, como testigos estuvieron presentes la niñera de las víctimas y el padre de ellas quienes comentaron lo que sabían sobre lo que les habrían dicho las nenas.

Además, los profesionales que trabajaron en la instrucción del caso comentaron su labor durante el mismo.

Cerca de las 16:00 horas se dieron a conocer los alegatos de las partes intervinientes: el representante del Ministerio Público Fiscal, Dr. Iván Saldivia, entendió que el delito estaba acreditado y pidió la pena de 10 años de cárcel para el acusado.

Por otro lado, los abogados defensores del imputado dijeron, al igual que su pupilo, que la causa estaba armada y que el delito no estaba acreditado, pidiendo así, su absolución.

Ahora el tribunal tendrá cinco días hábiles para determinar si condena o no, al encartado. La sentencia se dará a conocer el próximo martes.