La revelación televisiva de una abogada de 30 años que hace "horas extras" como trabajadora sexual escandaliza a Estados Unidos.

Katherine Sears vive en Iowa, está casada y tiene un hijo recién nacido. Hace unos días apareció en la televisión abierta de EE.UU. para contar cómo intenta ganarse la vida y desencadenar un debate nacional sobre el trabajo sexual.

Además de trabajar en un estudio como abogada penalista, Sears confesó que es prostituta part-time. Y su marido la apoya en sus dos carreras.

Para llevar adelante sus trabajos, Sears vive durante tres semanas en el estado de Nevada, donde puede ejercer legalmente la prostitución, y una semana en Des Moines, donde está su familia.

Con su marido se conoció en la Escuela de Leyes de la Universidad Drake. Comenzó a trabajar como prostituta cuando tenía 27 años y contó que llegó a ganar 55.000 dólares en un lapso de tres semanas.

Hace 4 meses nació su primer hijo, y ha reducido el tiempo que dedica a la prostitución para dedicarse a su familia y a su nuevo estudio de abogados.



"Me gusta el sexo. El sexo es divertido y logro que me paguen por hacerlo", contó Katherine Sears. Para ella, la actividad es empoderante, incluso para ella que sufre por ser tímida.

"Degradamos a las mujeres que son abiertas sobre su sexualidad", afirmó en la entrevista televisiva, y llamó a dejar de estigmatizar el trabajo sexual en el resto de Estados Unidos. "Sus cuerpos les pertenecen. No tenemos razón para decirles que no pueden dar el consentimiento para esto", afirmó.



"Creo que mientras más hablemos del tema, más chances tendremos de lograr la despenalización" de la prostitución, dijo. "No lograremos un cambio en las leyes si nos quedamos calladas", añadió la abogada, que se ofrece para defender gratuitamente a prostitutas en los tribunales.

"Las prostitutas son personas. Algunas son las mejores personas que he conocido", comentó.

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