Ron, un toro de cuatro años, se rascó sus partes trasera con un poste de luz, derribó el transformador y dejó sin electricidad a tres pueblos en South Lanarkshire.
Un total de 800 hogares sufrieron el apagón y quedaron atónitos al enterarse de que no se debía a un problema técnico, sino a la picazón de un animal.
El pesado animal logró derribar un transformador con sus movimiento y, milagrosamente, logró escaparse de una descarga de 11.000 voltios.
La dueña del toro, Hazel Laughton, habló con la BBC Escocia y declaró estar tan desconcertada como sus propios vecinos.
"Ron pesa una tonelada, pero nunca pensamos que podía tirar abajo un poste", aseguró la dueña de la granja.
Laughton explicó cómo se dieron cuenta de lo ocurrido: "Nuestro toro se acercó tímidamente, un poco aturdido, y cuando vimos los cables en el suelo y la caja del transformador en el campo, entendimos todo".
Por el inconveniente causado a los 800 hogares, la dueña escribió en el grupo de Facebook de la comunidad unas sinceras disculpas por el comportamiento del toro.
"A ron le picaban mucho sus partes traseras y se rascó contra el poste de electricidad. Le pedimos perdón por el apagón" indicó.
"Estamos pensando cambiarle el nombre a Sparky ("Chispita" en inglés), ya que logró evitar una abrumadora descarga eléctrica; de alguna forma volvió a vivir", agregó en tono gracioso.
