San Lorenzo cerró la tercera fecha de la segunda fase de la Copa Diego Maradona con una victoria clave y con ribetes heroicos por 3-1 sobre Atlético Tucumán para mantener sus chances de campeonato y dejar afuera al Decano, una decepción tras su gran primera ronda.
El Ciclón empezó arriba temprano, cuando Alexander Díaz bajó a Yonathan Cabral en el área y Ángel Romero no falló al ejecutar el penal a la derecha de Cristian Lucchetti.
Después, el Ciclón administró bien su ventaja pero no pudo evitar, en el último tramo del período, entrar en un ida y vuelta que le dio vida al local. Javier Toledo lo tuvo dos veces de cabeza y Guillermo Acosta pegó un disparo en el travesaño; como contrapartida, se agigantó Cristian Lucchetti ante Federico Gattoni y Óscar Romero, que también desperdició otro remate por falta de puntería.
El complemento arrancó con tónica similar pero Víctor Salazar se fue expulsado muy rápido por juego brusco y de ese tiro libre salió el centro al segundo palo de Nicolás Aguirre que conectó Leonardo Heredia de cabeza por derecha para empatar con un tiro cruzado.
Sin embargo, después de aguantar bien la igualdad, el conjunto de Mariano Soso logró torcer la historia a los 29, cuando aprovechando los desentendimientos del fondo local llegó Uvita Fernández por izquierda para definir sin piedad al segundo palo. Un premio al delantero que volvía tras una larga lesión.
Por último, a los 42, Juan Ramírez recibió detrás de la línea del medio, tomó a la defensa mal parada y arribó a posición de gol, donde resolvió de la mejor manera tras dejar en el camino al Laucha.
Así, San Lorenzo construyó una victoria sólida y de inyección anímica que le permite quedar expectante para lo que viene. Recuperó aliento y sabe que depende de otros, pero terminará el año con otro semblante.