Adabel Guerrero fue con su padre Eduardo a ¿Quién quiere ser millonario? y contaron cómo fue su reencuentro después de haber estado once años separado. "Una vez estábamos viendo el programa juntos y él contestaba todas bien, por eso le dije de venir", contó la bailarina. Papa e hija pudieron lucirse y ganaron 130 mil pesos.

Pero no todo fue preguntas y respuestas, entre cada consigna, Adabel se iba abriendo un poco más e iba contando cómo vivió el reencuentro con su padre. "Siempre me sentí abandonada, ese fue mi trauma infantil. Cuando perdí a mi mamá me sentí sola, casi huérfana. Siempre fue un dolor decir: '¿Por qué está tan lejos?'", contó Adabel.

Los papás de Abadel se fueron a vivir a Estados Unidos y volvieron a Argentina para tener a sus hijos, luego se les hizo imposible vivir todos en el exterior y la bailarina y sus hermanos regresaron al país con su mamá. Eduardo visitaba a la familia una vez por año porque se había quedado trabajando afuera.

Luego, cuando la bailarina tenía 17 años recibió otro duro golpe: falleció su madre. Allí ella sintió profunda soledad y, según cuenta, se crió sola. En 2008 fue la última vez que vio a su padre, se pelearon, y ella decidió que no lo quería ver nunca más.

Todo eso cambió cuando nació Lola, la primera hija de la ex vedette. "Cuando quedé embarazada me pensé en contactar a mi papá, aunque después lo evadía. Pero un día me levanté muy triste, muy vacía, y mirando a Lola jugar dije: 'Me quiero contactar con mi papá'.", contó Adabel. "Habíamos estado casi 11 años sin vernos por una pelea fuerte de tipo familiar, pero hoy estamos juntos y disfrutando", agregó la bailarina.

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