
El Departamento de Guerra de Estados Unidos confirmó este jueves que envió cazas de última generación F-35B a Puerto Rico para que participen en el operativo que Washington ha activado para combatir el narcotráfico en el Caribe, un despliegue que Venezuela ha denunciado por considerar que busca forzar un cambio de Gobierno en Caracas.
"Los cazas F-35B Lightning II del Escuadrón de Ataque de la Infantería de Marina 225 ya se encuentran en Puerto Rico. Están listos para combatir contra los carteles cuyas actividades ilícitas han tenido devastadoras consecuencias para los estadounidenses durante décadas", explicó el Departamento de Guerra (ex de Defensa) en un escueto mensaje en la red social X.
La configuración B del F-35 es la que permite el despegue en corta distancia y el aterrizaje en vertical, por lo que teóricamente tiene capacidad para realizar estas operaciones desde las cubiertas de tres de los buques que Estados Unidos tiene desplegados en el sur del Caribe.
Medios locales ya habían informado a principio de semana que al menos cinco aviones de combate F-35 habían arribado a la pista del aeropuerto regional José Aponte de la Torre, la antigua base Roosevelt Roads, en el municipio de Ceiba, en el noreste de Puerto Rico.
El presidente Donald Trump acusa a Maduro de liderar el denominado Cartel de los Soles, algo que niega el Gobierno de Venezuela, y ha ofrecido una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca a la captura del mandatario venezolano.
El operativo, cuya efectividad ha sido puesta en duda por expertos que señalan que el Caribe no es una ruta usada a gran escala por los narcotraficantes para introducir narcóticos en Estados Unidos, ha sido duramente criticado por Venezuela, que ha activado maniobras militares en la isla de La Orchila, en el Caribe venezolano, para dar respuesta a lo que ha calificado como "amenaza" de Washington.
Esta semana, el presidente estadounidense anunció esta misma semana que el operativo desplegado en la región destruyó una segunda lancha, causando la muerte de sus tres ocupantes, que según Washington eran "narcoterroristas" venezolanos que transportaban drogas.
Luego afirmó que fueron tres, no dos, las embarcaciones hundidas por el gobierno norteamericano en su ofensiva en el Caribe. "Derribamos barcos. En realidad fueron tres barcos, no dos, pero ustedes vieron dos", le dijo Trump a la prensa en la Casa Blanca.
El republicano se refirió a esta tercera embarcación un día después de informar que las fuerzas armadas estadounidenses habían atacado una lancha en la que, dijo, murieron tres personas, que calificó de 'terroristas'. Poco después, en el Despacho Oval, afirmó que la lancha destruida transportaba cocaína y fentanilo.
Consultado sobre las acusaciones de Nicolás Maduro acerca de querer invadir Venezuela, el mandatario simplemente respondió: "Dejen de enviar (miembros del) Tren de Aragua a los Estados Unidos. Dejen de enviar drogas a los Estados Unidos".
El sábado pasado, Caracas denunció que un "destructor" de Estados Unidos abordó de manera "ilegal" y ocupó durante ocho horas una embarcación venezolana con "nueve pescadores" que estaban en aguas del país sudamericano.