Elon Musk perdió el primer round en la disputa que lleva adelante con Twitter por querer bajarse del acuerdo de compra de la red social. Una jueza del estado de Delawere fijó este martes la realización de un juicio corto y acelerado en octubre.
La magistrada alegó que la “nube de incertidumbre” sobre la compañía de medios sociales, después de que el multimillonario se echara atrás en un acuerdo para comprarla, es motivo suficiente para determinar la fecha

Jude McCormick, la jueza principal del Tribunal de la Cancillería de Delaware, que se ocupa de muchas disputas empresariales de alto perfil, declaró sobre su decisión que: “Cuanto más se retrase, mayor será el riesgo”.
Twitter está tratando de obligar al multimillonario a cumplir su promesa de abril de adquirir la empresa por 44.000 millones de dólares, y quiere que esto ocurra rápidamente porque alega que la disputa está perjudicando su negocio.
Por esa razón, la compañía había pedido la realización de un juicio acelerado en septiembre -Musk solicitaba esperar hasta principios del próximo año debido a la complejidad del caso-. Sin embargo, McCormick afirmó que el equipo de Musk subestimó la capacidad del tribunal de Delaware para “procesar rápidamente un litigio complejo.”

William Savitt, abogado de la red social, acusó a Musk de querer perjudicar a la empresa: “Es un intento de sabotaje. Está haciendo todo lo posible para hundir a Twitter”. Además, el letrado afirmó que el acuerdo de fusión impugnado y los tuits de Musk desprestigiando a la empresa estaban infligiendo daño a la empresa.
Musk, el hombre más rico del mundo, se había comprometido a pagar 54,20 dólares por acción por Twitter, pero desde hace un par de semanas intenta salirse del acuerdo. El argumento del CEO de Tesla es que la empresa no ha proporcionado información adecuada sobre el número de cuentas de Twitter falsas -bots de spam-, y que ha incumplido sus obligaciones en virtud del acuerdo al despedir a altos directivos y a un número significativo de empleados.
Para los abogados de Musk, la idea de que su cliente está tratando de dañar a Twitter es “absurda” y afirmaron que el CEO de Tesla no tiene ningún interés en dañar a Twitter. Y recordaron que el magnate nacido en Sudáfrica es el segundo mayor accionista de Twitter, con una participación mucho mayor que la de toda la junta directiva.
Rossman, uno de los abogados de Musk, argumentó que el pedido de postergación del juicio se debe a que se necesita más tiempo. El acuerdo por la compra de Twitter se trata de “una de las mayores operaciones de absorción de la historia” e implica que existe una cantidad masiva de datos que hay que analizar.
Esta decisión de la jueza McCormick definió el fin del primer round en la batalla legal por la compra de Twitter. Fue un revés para Elon Musk, que pretendía demorar el comienzo del juicio que finalmente tendrá lugar en octubre.