El representante Leandro Santos fue citado a declaración indagatoria tras haber sido denunciado por la modelo Florencia Cocucci, quien dijo que el hombre la amenazó para evitar que contara que él se dedicaba al negocio ilegal de la prostitución VIP, informaron fuentes judiciales.
La citación a indagatoria fue decidida por el juez federal Sebastián Casanello, quien indagará a Santos el 15 de julio a las 10 por medios virtuales, en el marco de una causa que se inició con una denuncia presentada por el abogado Omar Saker.
Santos está acusado de haber amenazado a Cocucci “entre marzo de 2015 y marzo de 2016, por diversos medios y de forma tanto directa como anónima con el propósito de que la nombrada no diera a conocer la actividad que habría desplegado entre junio de 2009 y diciembre de 2014”, según surge del expediente judicial.
Fuentes con acceso al expediente señalaron que existe la sospecha de que las supuestas extorsiones tenían, entre otros objetivos, el de evitar que Cocucci revelara información vinculada al fallecido fiscal Alberto Nisman con quien compartió un viaje a México.
El período de tiempo investigado coincide con los inicios de la investigación de la muerte de Nisman, quien el 18 de enero de 2015 fue encontrado muerto, con un tiro en la cabeza, en el baño del departamento que habitaba en una torre de Puerto Madero.
Cocucci declaró como testigo ante la fiscal Viviana Fein en el marco de la causa en la que se investiga la muerte de Nisman donde relató, al igual que otra modelo, que el fiscal la había ayudado a conseguir la visa para viajar a los Estados Unidos.
Santos, quien ya estuvo detenido en dos oportunidades, fue procesado en diciembre pasado, acusado de formar parte entre 2009 y 2014 de una organización de trata transnacional que captaba a mujeres con fines de explotación sexual dedicada a la “prostitución VIP”.
El juez Casanello lo procesó "por haber liderado o haber formado parte entre junio de 2009 y diciembre de 2014, de forma sostenida, una organización criminal trasnacional dedicada a captar, trasladar -tanto dentro del país como desde o hacia el exterior-, acoger y recibir mujeres mayores de edad -de nacionalidad argentina y uruguaya- con fines de explotación sexual”.
