Entonces uno de ellos rompió con un martillo la ventanilla delantera derecha, del lado del acompañante, y así arrebató una bolsa de nylon que contenía unos tres millones de pesos, así como una cartera negra con otros efectos personales. Luego volvieron a subir al Onix y se dieron a la fuga rápidamente.
Unos quince minutos después personal del Comando Radioeléctrico que patrullaba la zona de Felipe Moré y el pasaje Lejarza divisó un Chevrolet Onix que pasaba a gran velocidad y con varios ocupantes. Les llamó la atención además que el auto tenía la luneta trasera dañada y cubierta con un nylon transparente pegado con cinta. Los policías intentaron accionando la sirena hacer detener al Onix pero el conductor de este auto aceleró y tomó por Matienzo al sur.
Así se inició una persecución que continuó por Deán Funes hacia el oeste, Teniente Agneta hacia el sur, Saavedra, Espinillo, Juan XXIII hacia el oeste, Magallanes al sur, Rivero hacia el este , Comandos 602 hacia el norte y otra vez Juan XXIII hacia el oeste. En ese tramo los policías realizaron una maniobra de cerrojo que provocó que se reventara un neumático del Onix, que terminó arriba de una vereda.
Sin embargo los sospechosos siguieron con el escape, tomaron por Espinillo hacia el norte donde se toparon con otro cerrojo policial. En ese marco Héctor C. y Luis P. bajaron corriendo del Chevrolet para adentrarse en un complejo de Fonavis donde fueron detenidos. Por su parte, Emanuel P. fue detenido luego de que los uniformados lo observaran agazapado detrás de un tapial del mismo complejo.
Fuente: La Capital de Rosario.
