Un joven identificado como Ramón Figueroa quedó detenido en la una comisaría catamarqueña luego de haberse quedado dormido en un automóvil de alquiler.
El chofer del taxi llamó a la policía cuando, al llegar al lugar de destino, el pasajero no respondía a su llamado. Los efectivos tuvieron que despertar al frustrado ladrón, a quien llevaron al calabozo.

En el procedimiento, según informa diario El Esquiú, los uniformados secuestraron también un ventilador de pie, el que había sustraído antes del edificio de calle San Martín al 300, donde funcionaba la Cámara Penal 2.
Fuentes policiales y judiciales informaron que todo inició antes de las 5 de la mañana del jueves último. Figueroa llegó hasta la parada de taxis de calle República, frente a la plaza 25 de Mayo, y abordó un automóvil Fiat Siena. Al subir, el joven le pidió al taxista que lo llevara hasta el viejo edificio de la Cámara Penal N° 2 de calle San Martín pasando Junín.
Al llegar le pidió que detenga la marcha, descendió del auto, se dirigió al edificio y al salir cargó un ventilador de pie en la parte posterior del auto. Luego le pidió que lo trasladara hasta la calle Conesa, frente a la plaza de Villa Cubas.
El taxista continuó el viaje y al llegar al destino indicado advirtió el pasajero estaba dormido y no respondía, por lo que llamó a la policía.
Finalmente, los efectivos de la Comisaría Quinta trasladaron al sujeto a la dependencia, al igual que el ventilador. Informaron luego del procedimiento a la Unidad Judicial.