Un nuevo e inesperado round de una insólita pulseada judicial estalló entre el juzgado federal de Dolores y el fiscal federal porteño Carlos Stornelli.
El juez federal Alejo Ramos Padilla le negó a Stornelli que se defienda con el abogado que él eligió para asistirlo en la indagatoria prevista para el próximo 29 de noviembre.
Ramos Padilla no le permitió al abogado Juan Martín Cerolini, en quien confió Stornelli, asumir su defensa, por la existencia de “intereses contrapuestos” que el propio fiscal descartó al designarlo.
Lo hizo porque Cerolini fue abogado del agente aduanero Carlos Liñani, quien está procesado por haber presionado a Pablo Barreiro, ex secretario de Cristina Fernández de Kirchner, en una derivación de la Causa Cuadernos.
El juez de Dolores contradijo, incluso, al propio fiscal de la causa, Juan Pablo Curi, quien se había manifestado a favor de aceptar a Cerolini como abogado de Stornelli.
“Teniendo en cuenta que en aquel proceso se encuentra como único imputado y procesado Liñani, que se presentó Stornelli como acusador privado y que allí venía actuando como defensor de Liñani el Dr. Cerolini, existe una notoria incompatibilidad para el ejercicio del cargo de defensor para el que ha sido propuesto”, subrayó Ramos Padilla.
Así, le cercenó a Stornelli la posibilidad de defenderse con el abogado que él mismo eligió, por razones que el propio fiscal no consideró relevantes a la hora de elegirlo.
“La existencia de posibles intereses contrapuestos debe ser advertida no sólo en el ejercicio simultáneo de dicho ministerio sino también en su ejercicio sucesivo. (…) No podrá asumir la defensa de un imputado quien sea o haya sido, ostensible o encubiertamente, defensor o representante de cualquiera de las otras partes cuya situación procesal fuera contrastante con la de aquél”, insistió Ramos Padilla.
La decisión del juez de Dolores cayó mal en las cercanías de Stornelli, pues supone una suerte de animosidad para con él en el contexto de su decisión de presentarse a declarar como imputado, después de haberse negado a hacerlo en siete oportunidades.
La resolución, a la que accedió A24.com, determina que Stornelli “podrá nombrar otro letrado de confianza en su reemplazo o continuar con la asistencia letrada en exclusiva de la Dra. Raquel Pérez Iglesias”, quien fue designada la semana pasada como “co-defensora”.
Ante el nuevo escenario derivado de la negativa de Ramos Padilla, Pérez Iglesias quedó como la única defensora de Stornelli en la causa de Dolores.
