Se trata de un caso que se registró a mediados de diciembre del 2011 y que, luego de casi 9 años, se realizó el juicio por homicidio culposo. EL mismo tiene como imputado a un hombre de apellido Barría, un ciudadano de Río Turbio, provincia de Santa Cruz.
El caso en cuestión se remite al 14 de diciembre del 2011 y tuvo lugar en la ruta N° 5, entre el paraje La Esperanza y Río Gallegos, a unos cuarenta 40 kilómetros de Las Vegas.
De acuerdo a la elevación y acusación fiscal, Barría estaba acusado de ir a 180 km/h sobre esa ruta, volcar y terminar con la vida de Jorge Chire, un compañero de trabajo que viajaba con él y salió despedido cuando el Volkswagen Gol, en el que circulaban, volcara.
El auto en cuestión era modelo 95, tenía un motor “preparado” para competiciones y fue uno de los últimos que la empresa alemana hizo con carburador, antes de pasar al sistema de inyectores.
El juicio se realizó la semana pasada en nuestra ciudad capital y Barría reconoció su responsabilidad por el hecho y pidió perdón a los familiares. De igual manera, tanto la Fiscalía como la querella pidieron que sea sentenciado. El fiscal pidió dos años y medio de prisión en suspenso mientras que los abogados de la familia doliente, pidieron la máxima, es decir tres años de cárcel.
Hoy por la mañana se conoció el fallo del tribunal encabezado por Joaquín Cabral: los jueces dieron lugar al pedido de la fiscalía y condenaron a Barría a la pena de dos años y medio de cárcel en suspenso y cinco años de inhabilitación para conducir.
