Un remisero caletense fue asaltado por un supuesto cliente, quien además de robarle la recaudación intentó matarlo con un arma blanca. Las actuaciones estuvieron a cargo del personal de la División Comisaría Quinta de la localidad norteña de la provincia de Santa Cruz.
El hecho ocurrió a las 06:30 horas, de éste miércoles cuando de repente se solicitó un viaje a la base de Taxi – Comp, ubicado en el Bº Koltum casi en el límite con el Bº Jardín, en la ciudad de el Gorosito.
Sobre el particular, Santa Cruz en el Mundo dialogó con el remisero, quien muy gentilmente nos contó el mal momento que debió sufrir.
El damnificado nos expresó que “fui al lugar y levanté un pasajero, quien al recorrer unas pocas cuadras por el Bº Esperanza, sobre calle Santa Fe, se encapuchó con una campera que llevaba y me atacó con un cuchillo, agarrándome de atrás, solicitando que le entregue la plata y el celular, pero el teléfono no se lo di, sólo le alcance la billetera con el dinero”, casi sin hacer una pausa el trabajador continúo y mencionó lo más difícil “ahí paramos y empezó a tratar de clavarme el cuchillo, como pude con las manos traté de defenderme, el muchacho estaba como fuera de sí, me alcanzó a cortar los dedos, me marcó la cara y parte del cuello, ya que intentó clavarme el cuchillo en la garganta porque me tenía agarrado de atrás y con una sola mano intentó matarme”.
Ya casi como dando un suspiro y en medio de su horario de trabajo siguió relatando y nos dijo que “de pronto como que se calmó y ahí me dijo que me bajara y se llevó el auto, como que se le pasó un poco, aunque estaba muy nervioso”.
Pudimos saber que el ladrón se llevó el Volkswagen Gol Trend de color celeste que está dispuesto para el servicio de remise, del cual el muchacho herido es sólo un chofer.
Asimismo, nos precisó que “al bajar, yo salí hacia un descampado todo herido con sangre en el rostro y a pocos metros le hice seña a una vecina y le dije que me ayudara porque me habían asaltado, ella me llevó unas cuadras y alcanzamos a ver mi auto estacionado cerca, en el mismo barrio con las llaves puestas. Me subí y fui directamente a la Comisaría, donde me trasladaron a la guardia del hospital Zonal para hacerme las curaciones”.
Hoy, a sólo 48 horas del aterrador momento que debió soportar, donde estuvo en juego su propia vida, el remisero ya está trabajando, porque claro, debe llevar el pan a su casa. Duro y desgarrador relato del hombre que es chofer y maneja un vehículo todos los días, cuando habló con nosotros estaba de operador.
Por supuesto, a todo esto, la policía trabaja para tratar de determinar la identidad del malviviente, sujeto que aún está libre por las calles de Caleta Olivia.