El Gobierno asumirá el control y regulación de la importación y exportación de semillas y aceites de uso medicinal terapéutico de cannabis. Para eso, creará la empresa BioChubut Sociedad del Estado con un capital social de $ 10 millones. Proveerá a pacientes que no puedan abonar altos costos y la compañía estará compuesta por un presidente y cuatro directores titulares.
EL CHUBUT accedió en exclusiva al proyecto de ley que enviará el gobernador en las próximas horas a la Legislatura. Se trata de la creación de la empresa BioChubut S.E. que tendrá el control de la producción de cannabis y su eventual industrialización en cantidades suficientes para el uso terapéutico.
La empresa contará con un capital social de $ 10.000.000, sumado a las partidas que pueda asignarle el gobierno provincial a través de la Ley de Presupuesto y Leyes Especiales.
En el artículo 2 queda claramente establecido el fin que persigue la gestión del gobernador Mariano Arcioni: “Asumirá el control y la regulación de las actividades de importación y exportación de semillas, aceites y otros productos derivados del cannabis, plantación, cultivo, cosecha, producción, adquisición a cualquier título, almacenamiento, comercialización, distribución, uso y consumo de cannabis para ser utilizado exclusivamente para fines medicinales o de investigación científica”.
El dossier al que tuvo acceso en forma exclusiva EL CHUBUT señala que a los fines de dar cumplimiento a lo establecido en el artículo 2, “se crea una Sociedad del Estado bajo la denominación Biofarmacéutica Chubut Sociedad del Estado (BioChubut. S. E).
La sociedad deberá constituir domicilio en la provincia de Chubut, pudiendo establecer sucursales, agencias o representaciones en cualquier punto del territorio provincial, nacional y el extranjero.
“BioChubut impulsará la producción provincial de Cannabis y su eventual industrialización en cantidades suficientes para su uso terapéutico”, puntualiza la iniciativa que desembarcará en las próximas horas en la Legislatura.
Costo
Entre los puntos medulares de la propuesta que elaboró el Ejecutivo figura que la Sociedad del Estado “también garantizará la provisión medicinal para pacientes que no pueden pagar altos precios de importación, incorporándose al vademécum obligatorio de las Obras Sociales y al sistema hospitalario estatal y público”.
No obstante, la empresa habilitará y diagramará un “registro especial” que tendrá carácter de “reservado y confidencial”, para ser utilizado solo por pacientes individuales e instituciones médicas para uso en tratamientos médicos en sus establecimientos.
Los objetivos de BioChubut
Entre los lineamientos preferenciales que buscan imprimirle desde Fontana 50 a esta empresa se encuentran “el cultivo y explotación de cannabis y sus derivados con fines científicos, medicinales y terapéuticos, en todas sus variedades, así como su producción, industrialización y comercialización; la instalación y explotación de establecimientos, equipamientos y plantas industriales necesarias a tales fines”.
Podrá adquirir, elaborar, fabricar, transportar, almacenar, distribuir, comercializar, elaborar, importar y exportar semillas, plantas, abonos, material vegetal, material fitosanitario y fertilizantes.
En la misma dirección, la empresa podrá promover la realización de obras de infraestructura, la prestación de servicios, capacitación de personal, prestación de asistencia técnica, abastecimiento de equipos e insumos, la compraventa de productos, la asociación con empresas u organismos, ya sean públicos o privados.
Además, tendrá luz verde para solicitar permisos, autorizaciones y celebrar convenios o acuerdos con los organismos nacionales o internacionales vinculados al cultivo, producción, industrialización, comercialización, importación y exportación de cannabis.
